Parecidos inquietantes
Trump y Sánchez van hermanados como líderes de un modelo agresivo y populista
El último bulo de Sánchez
La reacción de Trump a su condena por 34 delitos («es una estafa… un juicio amañado… vivimos en un Estado fascista») refleja que lo de Pedro Sánchez podría ser peor, incluso demuestra que puede llegar el día que esto se ponga peor. Cuestión de tiempo, ... de fases, de etapas en la degradación política. Trump y Sánchez van hermanados como líderes de un modelo agresivo y populista, de un personalismo autoritario que propicia el enfrentamiento social. Ambos han hablado de levantar muros, dos Américas o dos Españas, ambos han coincidido en la obsesión contra la prensa a la que han convertido en «enemiga del pueblo» y no es que ellos vulneren el espíritu o la letra de las leyes, sino que los jueces conspiran para desalojarlos del poder. Sánchez no ha auspiciado un asalto al Congreso, pero la mañana en la que se enteró de que su mujer estaba imputada por corrupción mandó una carta a los españoles instando a una rebelión contra la prensa crítica, la máquina del fango y la supuesta persecución judicial. Parecidos inquietantes.
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